Casos de peleas de parejas, asaltos y otros hechos se reportaron con migrantes venezolanas que salieron del país para buscar un mejor futuro
No hay registros fehacientes sobre los asesinatos de venezolanas en el extranjero. Se estima que al menos 17 migrantes fueron ultimadas en diferentes hechos fuera del país, durante 2019.
Casos de peleas de parejas, asaltos, hasta venganzas, se reportaron desde países latinoamericanos y hasta la Guayana Holandesa, donde se produjeron los hechos.
De los 17 asesinatos de venezolanas, cuatro se produjeron en Perú, cuatro en Colombia, dos en República Dominicana, uno con dos víctimas en Guatemala, uno en Chile, México, Panamá, Ecuador y Surinam.
El pasado 16 de julio, la Asamblea Nacional reportó a través de su Twitter declaraciones de la diputada Manuela Bolívar, quien señaló que solo por la trata de blancas han sido asesinadas 41 venezolanas en el extranjero, aunque no especifica si la cifras corresponden a 2019.
@manuelabolivar | “Lo que hay sobre este tema es un gran silencio, a las mujeres les quitan su documentación para ingresarlas a redes de trata de personas, 41 venezolanas han resultado asesinadas en el extranjero por esta causa”. #AgendaAN #16Jul — Asamblea Nacional (@AsambleaVE) July 16, 2019
Conteo lamentable
Corría enero y desde República Dominicana se difundió la información sobre la muerte de Keily Andrea Pernía Álvarez, de 28 años, en San Pedro de Macorís.
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Debajo del Puente Francisco del Rosario Sánchez, a la orilla del río Higuamo, localizaron a esta extranjera, con una extensión eléctrica, con la que aparentemente fue estrangulada el pasado 3 de enero.
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Veintiocho días después, en un apartamento de Santo Domingo, asesinaron a puñaladas a la venezolana de 24 años, Virginia Rojas Collado, quien estaba desaparecida desde el 27 de enero. Fue la segunda migrante ultimada en el país dominicano.
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Mariana Maciel Martín, de 23 años, se convirtió el 4 de enero en la hasta ahora única venezolana que matan en Panamá en 2019. Ella laboraba como mesera en un restaurante de la Plaza Centennial, en la capital panameña, cuando un grupo de antisociales llegó al sitio para matar a Carlos Betrón, involucrado con una banda que se disputaba con sus verdugos un cargamento ilícito. La dama fue una víctima colateral.
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El 6 de febrero, la víctima fue Angery Katherine Pinto Oviedo, de 28 años, natural del Táchira, asesinada por su esposo, de 35, en la avenida Las Flores, de San Juan de Lurigancho, en Lima, donde la estranguló. El sujeto se quitó la vida al rociarse combustible y prenderse en fuego.
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Desirée Joselín Crespo Álvarez, de 32 años, murió el pasado 4 de mayo de un disparo en la cabeza, por parte de Juan Carlos Gutiérrez Segura, su jefe y gerente de una empresa automotriz, donde la dama era la administradora. El hecho se registró en un hotel de la avenida Rosa Toro, en el distrito San Borja, de la capital peruana. El individuo se pegó un balazo en la sien y así terminó con su existencia.
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Michelle Stephanie Flores Machado, una aragüeña de 22 años, fue otra víctima en el país inca. Su cadáver lo hallaron el pasado 27 de junio en Lima, en un terreno baldía de Villa El Salvador, cubierto con un caucho y con signos de estrangulamiento. Aparentemente le robaron su celular, pues no lo tenía entre sus pertenencias.
Según reporte de una amiga, Emely Mendoza, a la prensa peruana, en ese fecha vio a la chica abordar el carro de un sujeto que acababa de conocer. No supo más de ella.
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Otra joven venezolana, Yersely Yeraly Rodríguez Silva, defendía a una hermana del compañero sentimental de esta última, en Cúcuta. Brayan Peñaloza agarró un arma blanca y se la enterró en el pecho a la extranjera, el pasado 26 de agosto.
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El viernes 20 de septiembre, en una discoteca de Guatemala, mataron a tiros a las modelos venezolanas Alejandra Alfonzo Flores, de 24 años, y Lisa Burgos, de 27, cuando celebraban un cumpleaños. Al sitio llegó un pistolero que cubría su cara con globos. Desenfundó el arma de fuego y masacró a las féminas. En ese hecho perdió la vida una guatemalteca que compartía con las migrantes.
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Diez días después, la prensa mexicana reportó la muerte de la merideña Ainara de la Cruz Pavón, de 23 años, cuyo cuerpo localizaron sin su cabeza en un terreno baldío de Chiapas. El hecho se había registrado el pasado julio, pero fue dos meses después cuando unas amistades la identificaron.
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Karinés Chiquinquirá Bohórquez Rondón, una zuliana de 28 años, madre de cuatro hijos, fue víctima de un feminicidio. Su expareja, Darwuin Vargas, la citó el pasado 5 de octubre a un motel, en Barranquilla, donde al parecer hubo una discusión. El hombre utilizó una sábana para estrangularla, según reportes de la prensa colombiana.
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El 23 de noviembre será recordado con tristeza por los allegados de la comunicadora social zuliana, Katherinne Andrea Fernández Quintero, de 28 años, presuntamente asesinada por su pareja, Jhonatan Enrique Áñez Morales, en la comuna de Puente Alto, en Santiago de Chile. El hombre permanece tras las rejas a la espera del juicio.
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La falconiana Rubia Bermúdez, de 20 años, fue la primera víctima de diciembre. El lunes 2 trató de evitar un pleito entre su pareja y otro sujeto, en la localidad de Fontibón, en Bogotá. El desconocido sacó un arma blanca y atacó a la joven para dejarla sin vida.
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Un día después, otra venezolana, Margely Katherine Fernández Ortega, de 28 años, madre de cuatro hijos, fue asesinada en Perú. Al parecer, unos sujetos se la llevaron hasta un terreno situado debajo del puente Huánuco, en el distrito El Agustino, de Lima, para interrogarla sobre un asunto que los comprometía. Presuntamente la fémina los delató ante las autoridades y por ese motivo la tirotearon. Grabaron un video del asesinato y lo colgaron en las redes.
El 8 de diciembre, una pareja venezolana protagonizó una pelea a cuchillo en Soledad, al sur de Barranquilla. Allí murió Karina del Valle Rodríguez, de 39 años. Su compañero sentimental, Jorge José Rodríguez Urdaneta, de 41, resultó herido y lo recluyeron en un centro de salud. Se desconoce si convaleció y lo judicializaron por el hecho.
Cinco días después, ocurrió una pelea de venezolanas. Una mató a su contrincante, Deiyubys Isamar Blanco Flores, al enterrarle un arma blanca en la espalda, en la población de Zaruma, 10 horas y media al sur de Quito, en Ecuador.
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Karen Sánchez, coriana de 24 años, fue hallada sin vida el domingo 15 de diciembre, con heridas por arma blanca, en un apartamento del norte de Paramaribo, capital de Surinam, país conocido como Guayana Holandesa, que hace frontera con Guyana.
La joven fue en busca de mejores oportunidades a ese país, llevada de la mano de una compatriota, de quien sospechan los familiares de la víctima.
Con información de Versión Final.
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